驴C脫MO PUEDEN AYUDARNOS LAS SUPOSICIONES?
Sep 07, 2022Al definir la realidad es conveniente preguntarse si nos estamos basando en hechos, sesgos, hipótesis o conjeturas, si estamos inclinados a la verdad o a meras suposiciones. Los sesgos conducen a los prejuicios y a los estereotipos que son formas fijas de clasificar a las personas, situaciones e incluso contextos culturales y sociales.
Los estereotipos son creencias, pensamientos preconcebidos sobre cómo deben ser y cómo deben comportarse las personas. Los estereotipos y prejuicios pueden ser positivos, negativos o neutros y también pueden ser limitantes en el contexto de toma de decisiones o acciones. Socialmente tienen mucha fuerza, pero no pocas veces se originan en conjeturas o visiones sesgadas de la realidad.
1.- Suposiciones
Las suposiciones pueden formar gran parte de nuestros pensamientos automáticos, ocurren por debajo de nuestro nivel de consciencia, se relacionan con nuestra capacidad de hacer conjeturas con base en la información disponible, para llevarnos a conclusiones rápidas que damos por ciertas. Suponemos muchas cosas, pero quizás no somos conscientes sobre su influencia en la toma de decisiones, felicidad y equilibrio mental.
2.- Pensamiento crítico
Frente al problema de las suposiciones y sesgos en los que caemos consciente e inconscientemente, podemos recurrir al pensamiento crítico y a sus herramientas.
El pensamiento crítico consiste en la criba o depuración de lo que pensamos. Entre las herramientas principales de un pensamiento crítico se encuentran las siguientes:
- No precipitarse ante los juicios para evitar los prejuicios, las opiniones sesgadas y las suposiciones sin base.
- Evitar emitir juicios y cuidar nuestros estados emocionales para que nuestras formas de sentir no afecten los criterios de objetividad y justicia que necesitamos en los ambientes laborales y en la familia.
- Un pensamiento crítico estudia las causas y consecuencias de los problemas, no se inclina por las respuestas rápidas y superficiales.
Para evitar suposiciones debemos no solamente reconocer las causas de los problemas, sino también analizar las posibles consecuencias que puedan tener los juicios precipitados porque un juicio precipitado puede romper la unidad de un ambiente laboral o familiar.
Otros conceptos que nos ayudan a mantener el foco en el pensamiento crítico son: la hipótesis, la observación de los hechos y las circunstancias.
La hipótesis es una declaración que podremos validar, una idea por comprobar.
El hecho o evento ocurrido, podríamos decir que es demostrable de varias formas: testigos, hallazgos. Por lo tanto, desde el pensamiento crítico podemos constatar en un evento ocurrido lo que lo transforma en un hecho objetivo, observable.
La observación. Implica documentar lo que sucede en un determinado evento sin emitir juicios.
3.- ¿Por qué los seres humanos hacemos suposiciones?
Nos inclinamos a suponer y dar por cierto algo de lo que no tenemos pruebas basados en nuestras propias creencias y patrones de conducta. Muchas veces pensamos que podemos leer la mente de los demás y no solo esto, sino que también podemos dar explicaciones e interpretaciones sobre cualquier cosa o tema.
Esto sucede porque la razón humana tiene la facultad de buscarle sentido a los acontecimientos de la vida y su entorno, a las cosas que le suceden y a evitar lo que no comprende, el vacío. Para llenar espacios de una manera rápida, la razón supone e inventa. Ejemplos: muchas veces hemos oído decir: “este señor vuela con su imaginación”. O tal otro: “ve problemas donde no los hay”. O “fulano de tal se adelanta a los acontecimientos”.
Un pensamiento crítico corta con estas tendencias y aprende a preguntarse por la verdad. Si no entiendes algo, preguntas, estudias, buscas más información, no supones, no inventas. Encontramos, además, una suposición frecuente: creemos que hacer preguntas es de tontos, que ponemos en evidencia, públicamente, nuestra ignorancia etc. Contra esta suposición hay que luchar de diferentes maneras: dar tiempo para que los demás hagan preguntas en las reuniones de trabajo, en las clases, en la familia misma.
No asumir que sea innecesario el diálogo porque estamos preparados o conocemos un tema a fondo. No olvidemos que las emociones sugieren trampas y a veces un gesto cansado no significa un desprecio. Particularmente en el entorno familiar donde las emociones juegan un papel importante evitemos las suposiciones que puedan romper la unidad del tejido familiar. Esto vale también para las relaciones laborales y sociales.
En conclusión, no hagas suposiciones, evita los dramas emocionales, no caigas en chismes. Pregunta, si no has entendido algo. Habla con tu familia para evitar los indeseables mal entendidos. Ten valor para preguntar, olvida el miedo al rechazo. Siempre tienes derecho a decir lo que quieras, respetuosamente.
Pero concretamente: ¿Las suposiciones son buenas o malas en un contexto laboral o familiar?
La verdad es que las suposiciones no deberían necesariamente catalogarse como buenas o malas, simplemente son. Nos permiten hacer viajes a realidades alternativas, pueden ser una verdadera ventaja en pensamientos asociados a la construcción de pronósticos, desarrollo de hipótesis, durante procesos de creatividad y para el control de riesgos, por otro lado, pueden ser un enemigo de la comunicación efectiva, si dejamos brechas de información sin precisar adecuadamente, incluso tienen el poder de alterar estados de ánimo, influir en nuestra toma de decisiones y comportamiento.
Y con esto no quiero decir que está bien realizar un pronóstico o algún otro proceso basado en suposiciones, no, simplemente que no pensemos en ellas como algo necesariamente negativo, quizás más bien, como la apertura a un pensamiento que vamos a modelar posteriormente con el pensamiento crítico.
Podemos concluir que avanzar en conversaciones o contextos de toma de decisiones basados en suposiciones nos puede llevar a caminos o realidades que no queremos necesariamente vivir, por lo tanto, el múltiple enfoque, pensamiento crítico, las preguntas y validación de las hipótesis deben reinar en la construcción de nuestros modelos de pensamiento.
Gerónimo Galindo Salas